No se puede ubicar: ¿es la piel o la luz de las estrellas? Metallic Saffron se abre con la especia dorada del azafrán, suavizada por la mandarina y el aliento mineral. Osmanthus y violeta se arremolinan en una estela delicada y luminosa, casi comestible, casi irreal. Después, el ante lo envuelve todo en una segunda piel, suave pero cargada de algo eléctrico. A medida que el aroma se asienta, el pachulí y el Akigalawood zumban silenciosamente debajo. Huele como alguien a quien quieres seguir, pero nunca atrapar del todo.

¡Indispensable bajo el sol ardiente! Cítrica y acuática, las ligeras flores confieren a esta fragancia acuática un carácter único. La madera de cedro y el musgo de roble calientan el corazón para hacerlo aún más amaderado. Además, el pachulí y el almizcle blanco realzan la sensualidad.

La copa tintinea, la ciudad zumba. Un chispeante estallido de manzana y bergamota burbujea como el primer sorbo de un martini de medianoche: fresco, cargado, irresistible. El jengibre crepita en el fondo, mientras que la salvia y el enebro aportan una profundidad magnética. Anclado en madera de ámbar y vetiver, Martini Fizz es suave, seductor e intenso: una fragancia que brinda por la ambición.

Adecuado para cualquier momento y ocasión. Combina seductoras notas de cabeza de manzana, grosella negra y piña. En el corazón fresco con jazmín, abedul y bayas de enebro. Un fondo amaderado con musgo de roble apoyado por ámbar gris y un toque de vainilla.

Tobacco Sultan , un aroma de realeza e indulgencia, se abre con un estallido luminoso de cítricos y lavanda que evoca la elegancia de la tradición. A medida que la fragancia se despliega, la miel dorada y la canela cálida se mezclan con la riqueza del jazmín, creando un corazón tan decadente como las túnicas forradas de seda. Por último, el profundo tabaco y la aterciopelada vainilla se asientan en la piel, y su dulzura ahumada y especiada deja tras de sí un aura regia de poder y encanto.